DECRETO 363/2002, de 24 de diciembre, de reestructuración de la Dirección General del Patrimonio de la Generalidad de Cataluña.
| Sección | Disposiciones Generales |
| Rango de Ley | Decreto |
DECRETO
363/2002, de 24 de diciembre, de reestructuración de la Dirección General del Patrimonio de la Generalidad de Cataluña.
Con la última reestructuración de la Dirección General del Patrimonio de la Generalidad de Cataluña por el Decreto 305/1996, de 2 de septiembre, por una parte, se ajustaba la estructura a la realidad funcional y, por otra, se buscaba la consecución de unos objetivos a desarrollar en los que la incertidumbre de su alcance aconsejaban ser prudentes en la dotación de los recursos que se destinaban.
Así pues, las funciones que la actual estructura atribuye a la Dirección General del Patrimonio para el tratamiento de las herencias intestadas se concretan en el ámbito inmobiliario y consisten en llevar a cabo, en este ámbito, las actividades necesarias para la protección de bienes y derechos incluidos en el caudal de dichas herencias, una vez que la Generalidad de Cataluña haya sido declarada heredera. Ninguna otra función relacionada con las herencias intestadas resulta del mencionado Decreto. Por otra parte, el Decreto 244/1995, de 1 de agosto, de creación de la Junta Distribuidora de Herencias, atribuye a la Dirección General del Patrimonio una serie de funciones para el tratamiento de las herencias intestadas. Así mismo, el Decreto 156/2001, de 15 de mayo, crea la Junta de Administración y Liquidación de Herencias dependiente de la Dirección General del Patrimonio, regulando una serie de actos en los cuales su gestión y tramitación se traduce de forma directa en nuevas funciones a desarrollar por la Dirección General del Patrimonio, de quien depende esta Junta.
En la misma línea, la progresiva evolución de la base de datos que da soporte al inventario de inmuebles ha evidenciado la necesidad de ampliar los medios disponibles para conseguir la implementación definitiva del inventario que, además, requerirá dinamizar el proceso formativo de las personas usuarias, de tal forma que este proceso formativo se desarrolle periódicamente y al mismo ritmo que la evolución del inventario. Dentro de esta evolución es destacable el alcance que está tomando la consolidación de la norma de dibujo arquitectónico que obligará, dentro del contexto general, a hacer las adaptaciones que su actualización comporta, obligando, también, a la periódica formación de las personas usuarias.
Así mismo, la necesidad de conocer lo más exhaustivamente posible la situación real, documental y formal en que se encuentra cada inmueble de la Generalidad de Cataluña aconseja potenciar los sistemas de investigación, búsqueda y control de bienes y datos, así como impulsar la circulación de flujos informativos para garantizar la optimización de los recursos disponibles y, con la misma finalidad, se acentúa la oportunidad de establecer una oficina de supervisión de proyectos para las obras a ejecutar con destino o referentes a oficinas administrativas.
Cabe añadir, además, que la adaptación de la normativa patrimonial a los requisitos que genera la dinámica del mercado inmobiliario así como el establecimiento de la intervención sobre patrimonio de la Generalidad de Cataluña que se encuentre inmerso en un planeamiento urbanístico necesita, tanto desde una vertiente técnica como desde la vertiente jurídica, un tratamiento específico dentro del ámbito de la gestión del patrimonio inmobiliario.
Por otra parte, las funciones que se están desarrollando en el tratamiento de los bienes muebles lo son sin haberse designado una atribución concreta a ninguna unidad de la Dirección General del Patrimonio, cosa que exige la correspondiente regularización procediendo a la incorporación de estas funciones dentro del área que, por su especificidad, disponga de capacidad para compatibilizar las funciones que desarrolla con la asunción de aquellas.
Por último, cabe tener presente la reciente incorporación del Área de Gestión de los Riesgos y Seguros a la nueva Dirección General de Seguros creada en el seno del Departamento de Economía y Finanzas.
En conclusión, desde 1996 hasta hoy se ha podido constatar que se han satisfecho los objetivos inicialmente previstos, pero que la progresión de las funciones que se han desarrollado respecto a estos objetivos, así como aquellas que han sido atribuidas por otra normativa, han superado con creces las previsiones iniciales, poniendo de manifiesto que esta evolución ha generado un desajuste entre las funciones que se están desarrollando y los medios disponibles, haciendo necesario que la estructura de la Dirección General del...
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